FÓRMULA INFALIBLE PARA ADQUIRIR HÁBITOS SALUDABLES

Fuente: Kamù

Según un estudio de la Universidad de Scranton, marcarse metas con el nuevo año no es lo más sensato, solo un 10% de la población tiene éxito en lograr lo que se propusieron en esa época. No obstante, Kamú, Mercado Natural te da algunos consejos para no morir en el intento y realmente lograr un cambio en tu vida:

1.       Identifica lo que quieres cambiar: puedes empezar con una lista de cosas que quieras incorporar en tu vida (o dejar de hacer). Si por ejemplo te quieres enfocar solo en inicio de ejercicio, haz una lista que tenga que ver con el tipo de actividad física que te guste realizar. Tómate el tiempo para hacer un análisis de cómo estás hoy y cómo quieres estar mañana, pero siempre mentalízate a tomar la acción en presente, así no tendrás excusa para posponerla.

2.            Piensa positivo: el secreto es cambiar la perspectiva y hacer divertido todo aquello que te estás proponiendo. La mente tiene un gran poder en nuestro inconsciente, el cual se encarga de dirigir la mayoría de nuestras acciones. El aburrimiento puede ser uno de nuestros mayores enemigos en este proceso, por lo tanto, mantén tus pensamientos positivos y acompaña el cambio con acciones de interés, así estarás animado a seguir con tu nueva rutina.

3.            Modera tus expectativas: crear y cambiar conductas hacen parte del proceso. Uno de los errores más comunes es querer lograr resultados inmediatos, pero incorporar nuevas costumbres y rutinas a tu día a día lleva tiempo pues hay que adaptar no solo tu cuerpo sino tu mente a estos nuevos hábitos. Si algo te cansa o no te gusta, sigue probando con otras alternativas hasta encontrar lo que encaje para ti y tus gustos.

4.            Cree en ti mismo: así no lo creas, la imagen que las personas tienen de sí mismas puede ayudar o complicar el camino. Cuando decidimos incorporar mejores hábitos, nuestra imagen abandona viejas prácticas y transforma nuestra personalidad. Cree en lo que puedes lograr, aleja pensamientos de fracaso y visualiza cómo quieres llegar a ser cuando estés en la cima.

5.            Conoce tus horarios: Mantener un nuevo hábito requiere de toda nuestra actitud, esfuerzo y tiempo, lo que implica en algunos casos, hacer a un lado otras tareas. Todos tenemos momentos del día donde nos encontramos más dispuestos a realizar ciertas actividades como cocinar, ejercitarnos o estudiar. Descubre cuál es el momento más adecuado para realizar esta nueva actividad.

6.            Una meta a la vez: cada persona es diferente y no todos tenemos la misma resistencia, disponibilidad o mismo reto. Por eso te recomendamos comenzar con una meta a la vez. Esto hará que prestes más atención al objetivo que buscas y cuando ya lo hayas dominado, podrás seguir con el siguiente, y así sucesivamente hasta llegar al cambio por el que estás luchando.

7.            La constancia es la clave: para adquirir un hábito deberás repetir esas pequeñas acciones tantas veces como sea posible para que se vuelvan automáticas y que sin pensarlo se conviertan en parte de tu diario vivir. Para esto se requiere constancia y mucha dedicación. Aquí es muy valioso ser honestos y ponerse a prueba. Si lo haces a conciencia, a final del mes tendrás resultados gratificantes que te motivarán a seguir.

8.            No seas tan duro contigo: si un día fallas intentándolo, no te preocupes. Somos humanos y fallar hace parte del proceso, lo importante es seguir adelante sin importar los tropiezos. Una vez identifiques aquellos obstáculos que te impiden conseguir la meta será mucho más simple superarlos.

9.            Enorgullécete de tus logros: la motivación es decisiva para sumar nuevos retos a tu vida, por lo tanto, a medida que avanzas, aplaude el esfuerzo y progreso que conlleva cada paso que das, de esta forma mantendrás la emoción hasta el final. Pero recuerda que las recompensas deben ser coherentes con la meta, no olvides el motivo por el cual te propusiste hacer el cambio.

10.          21 días, un patrón de rutina: El hecho de realizar un hábito durante 21 días seguidos, dará mayor formalidad al compromiso que estás adquiriendo contigo mismo. Expertos encontraron que pacientes que se sometían a este “experimento” modificaban sus patrones neuronales repitiendo la conducta que deseaban obtener durante 21 días, preferiblemente en el mismo horario. El reto consiste en aguantar este periodo de corrido, teniendo determinación y voluntad, logrando que tu cuerpo y mente se acostumbren.